Para ponernos en situación, es 1993 y Sega ha cosechado sendos éxitos con Sonic the Hedgehog (1991) y su segunda parte (1992), llegando incluso a eclipsar las ventas de la Super Nintendo en algunos meses. Su objetivo actual es tener en las estanterías una nueva entrega de la saga para navidad, pero se hace evidente que no llegará a tiempo. ¿Qué hacemos? Pues contratar a unos lacayos para que hagan uno.
Así, el grupo de programación Polygames codificó en sólo unos meses algo completamente nuevo, basado en el popular nivel Casino Night del Sonic 2 y en Pinball Dreams (DICE, 1992). Así, con un apartado artístico proporcionado por el Sega Technical Institute, nació a toda prisa el Sonic Spinball para la navidad de 1993.